El Ayuntamiento de València ha abierto expedientes de cierre de actividad a más de 400 apartamentos turísticos de la ciudad, según ha informado el consistorio en un comunicado. Así, ha precisado que estos expedientes son consecuencia del “trabajo intenso” realizado por “los cinco grupos de inspectores de Obras y Licencias de Urbanismo y de los siete grupos de Policía Local, uno por cada distrito policial, que se encargan de rastrear la ciudad para detectar la actividad de apartamentos turístico ilegales”.
El concejal de Urbanismo y Vivienda, Juan Giner (PP), ha manifestado que “la lucha contra los apartamentos ilegales es una realidad en València desde que llegó María José Catalá (PP) a la Alcaldía”. “Hasta ese momento, con los gobierno de izquierda de Compromís y PSPV las inspecciones y las expedientes de cierre eran ínfimas”, ha señalado el edil.
La administración local ha añadido que los expedientes de cese sobre apartamentos turísticos ilegales “se han multiplicado por siete desde que es alcaldesa María José Catalá en comparación con los cierres decretados por el Ayuntamiento en 2022“.
Giner ha destacado que “ahora hay una voluntad política inequívoca de poner freno a estas actividades ilegales y un trabajo conjunto y constante desde las áreas de Urbanismo y Policía Local“.
Asimismo, el consistorio ha paralizado más de 1.000 peticiones de licencias de apartamentos turísticos pedidas meses antes de la suspensión de licencias aprobada por el pleno, que tenía carácter retroactivo, ha añadido la corporación municipal.
“Frente a la inacción del gobierno anterior, nosotros estamos actuando con determinación en la toma de medidas y en la potenciación de la labor de inspección para regularizar y hacer sostenible para los barrios esta actividad turística”, ha apuntado el responsable de Urbanismo y Vivienda.
BAJOS COMERCIALES
El equipo de Catalá ha añadido que “la proliferación de apartamentos turísticos se inició en el año 2015 con la llegada al gobierno municipal de –Joan– Ribó (Compromís) y PSOE”. “Desde entonces y hasta 2023 se inscribieron más de 4.500 apartamentos. Además, con la peculiaridad, que este mismo gobierno de izquierdas en el año 2018 aprobó un cambió el planeamiento urbanístico para permitir que en los bajos comerciales se abrieran apartamentos turísticos. Hasta la fecha estaba prohibido destinar a viviendas bajos comerciales de la ciudad”, ha remarcado.
El concejal de Urbanismo ha asegurado que “el Ayuntamiento está trabajando en una nueva normativa que impida la proliferación de apartamentos turísticos y que defina el tipo de turismo que quiere la ciudad de València”.