La consellera de Hacienda Ruth Merino ha explicado este jueves que los presupuestos de la Generalitat para 2025 mantienen muchos de los principios que ya … inspiraron las cuentas de 2024, las primeras aprobadas por PP y Vox –que entonces formaba parte del Gobierno valenciano–. Uno de los principios de aquellas cuentas, de hecho, fue el recorte en el sector público instrumental de la Generalitat, que se redujo un 7,7% su presupuesto global respecto al ejercicio anterior. Aquel tijeretazo se vinculó con la voluntad del Consell de PP y Vox de marcar distancias con el Botánico y con los «chiringuitos», se dijo entonces, que se habían venido creando con empresas y fundaciones públicas.
La dana que el pasado 29 de octubre arrasó media provincia de Valencia también ha cambiado algunos de esos principios del Consell. Por ejemplo, el de ese tijeretazo en el sector público. El proyecto de presupuestos presentado este jueves por el Gobierno valenciano incrementa un 13% los presupuestos de empresas públicas y fundaciones dependientes de la administración autonómica. De hecho, los 3.836 millones de euros de 2024 se convierten en 4.349 millones en las cuentas presentadas ahora, aunque las transferencias de la Generalitat se reducen en 150 millones de euros.
Una de las entidades que más ve reforzado su presupuesto es la Agencia Valenciana de Seguridad y Respuesta a las Emergencias (AVSRE). Los 113 millones del presupuesto de 2024 se convierten en el proyecto de ley de 2025 en 355,7 millones de euros. El incremento es del 217% y parece muy vinculado a las consecuencias de la dana de hace ya casi cinco meses.
De hecho, la otra entidad pública vinculada al ámbito de las emergencias, la Sociedad Integral de Gestión Integral de Servicios de Emergencias (SGISE) pasa de un presupuesto de 57 millones en 2024 a los 74,8 millones que figuran en el proyecto de ley de 2025. Paradójicamente, el Consell de Carlos Mazón llegó a plantearse (antes de la dana) la posibilidad de suprimir una de las dos entidades públicas al considerarla como un ejemplo de despilfarro en el ámbito de las empresas públicas. La decisión ahora, incrementar el presupuesto de ambas va, obviamente, en el sentido contrario a ese planteamiento.
El incremento presupuestario en el sector público de la Generalitat afecta de forma singular a algunas de las empresas y entes más vinculados con la reconstrucción. Ferrocarrils de la Generalitat (FGV) ve incrementado su presupuesto de los 282 millones de 2024 a los 354 millones de 2025. La Entidad Pública de Saneamiento de Aguas Residuales (Epsar) pasa de unas cuentas de 293 millones a una previsión para este año de 345 millones de euros.
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También crece de forma notable el presupuesto del Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace), que pasa de los 167 millones de 2024 a los 280 millones que se presupuestan para este 2025. Una apuesta decidida por el impulso al crecimiento empresarial y que se complementa, en su apartado de creación de empleo, con un incremento del presupuesto de Labora de 80 millones de euros (de 445 a 525 millones de euros).
El proyecto de presupuestos de la Generalitat, en lo que al sector público se refiere, prevé también la creación de la nueva Corporación Audiovisual de la Comunitat Valenciana, la entidad que sustituye a la Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació (CVMC) y a la Societat Anònima de Mitjans de Comunicació (SAMC), con un presupuesto de 67,3 millones de euros.
Los presupuestos para 2025 constatan recortes en algunas de las empresas públicas como Vaersa, que pasa de 94 a 92 millones de euros, o la Fundación Centro de Estudios Ambientales del Mediterráneo, que pasa de 3,8 a 3,3 millones de euros. Espacios Económicos Empresariales (EEE), por contra, pasa de 148,5 millones a poco más de 69 millones. Turismo Comunitat Valenciana, por contra, pasa de 74,5 a 81,5 millones de euros en el nuevo presupuesto.